Chiquita Banana Cakes

Crecí lamiendo las paletas de la batidora de mi abuela. Me sentaba en la escalera de su casa en Cartagena a verla hacer “pudines”. Me encantaba ver cómo le echaba el almíbar caliente a la batidora llena de claras de huevo para hacer merengue. Un poquito más grande me pasaba las vacaciones del colegio haciendo todas las recetas de un libro de pastelería para niños que me compró mi mamá.

Estudié Ciencia Política y Mercadeo; fui periodista y editora de revistas; defendí con ahínco las libertades individuales, el libre mercado y la democracia; fui gerente de comunicaciones en la industria del entretenimiento y directora comercial en un medio digital, pero después de mucho intentarlo, las cosas simplemente no funcionaron. Un buen día, alguien a quien quise mucho y le debo mucho, probó mis tortas y me animó a compartirlas con el mundo. Así nació Chiquita Banana Cakes (Banana es mi gata, que es MUY chiquita).

El amor y la pasión por las cosas que hago, la gente que quiero y las ideas en las que creo, han sido mi motor de vida. Y ese motor me impulsa a seguir adelante a pesar de tantos tropiezos y tantas veces en las que me he caído.


Para las tortas de Chiquita Banana Cakes, solo uso los mejores y los más frescos ingredientes. He trabajado fuerte en mis recetas para llevarlas a su mejor punto, y que con mis tortas no solo les llegue a su barriga, sino a su corazón.


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